Friday, February 08, 2013

Cuando viniese la Primavera...Alberto Caeiro




Cuando viniese la Primavera,
Si ya estuviera muerto,
Las flores florecerán de la misma manera
Y los árboles no serían menos verdes que la Primavera pasada.
La realidad no necesita de mí.

Siento una alegría enorme
Al pensar que mi muerte no tiene ninguna importancia.

Si supiera que mañana moriría
Y la Primavera llegara pasado mañana,
Moriría contento, porque llegaría pasado mañana.
Si ese es su tiempo ¿cuándo habría de llegar sino en su tiempo?
Me gusta que todo sea cierto y real;
Y me gusta que así sea, porque así sería aunque no me gustara.
Por eso si muero ahora, muero contento,
Porque todo es real y cierto.

Pueden rezar en latín sobre mi ataúd, si quieren.
Pueden, si quieren, danzar o hacer la ronda cantando.
No tengo preferencias para la hora en que ya no puedo tener preferencias.
Lo que fuera, cuando fuera, es lo que será lo que es.

7-XI-1915

Alberto Caeiro
Poemas Inconjuntos
Traducción de Mario Bojórquez

Thursday, February 07, 2013

Cuando vuelva otra vez la primavera... Alberto Caeiro



Cuando vuelva otra vez la primavera
Tal vez ya no me encuentre en el mundo.
Me gustaría creer que la primavera es gente
Y suponer así que ella lloraría,
viendo como ha perdido a su único amigo.
Pero la primavera ni siquiera es una cosa:
Es una manera de decir.
Ni aun las flores vuelven, o las hojas verdes.
Hay nuevas flores, nuevas hojas verdes.
Hay otros días suaves.
Nada vuelve, nada se repite, porque todo es real.

Alberto Caeiro
Poemas Inconjuntos
traducción de Mario Bojórquez

Wednesday, February 06, 2013

Si yo muriera joven... Alberto Caeiro



Si yo muriera joven,
Sin poder publicar un libro,
Sin ver la cara que tienen mis versos en letra impresa,
Pido que, si quisieran entristecerse por mi causa,
No lo hagan.
Si así sucedió, así está bien.
Igualmente que mis versos nunca fueran impresos,
Ellos tendrían su propia belleza, si fueran bellos,
Pero no pueden ser bellos y quedarse sin imprimir,
Porque las raíces pueden quedar debajo de la tierra
Pero las flores florecen al aire libre y a la vista.
Tiene que ser forzosamente así. Nada lo puede impedir.

Si yo muriera muy joven, oigan esto:
Sólo fui un niño que jugaba,
Fui un pagano como el sol y el agua,
De una religión universal que sólo los hombres no tienen.
Fui feliz porque no pedí cosa alguna,
Ni busqué encontrar nada,
Ni hubo nunca más explicación para mí
De aquella de que la palabra explicación no tuviera sentido.

No deseé sino estar al sol o a la lluvia—
Al sol cuando había sol
Y a la lluvia cuando estaba lloviendo
(Y nunca otra cosa),
Sentir calor y frío y viento,
Y no ir más lejos.



Una vez amé, creí que me amarían,
Pero no fui amado,
No fui amado por la única simple razón—
De que no había de ser.

Me consolé mirando al sol y a la lluvia,
Y sentándome de nuevo a la puerta de la casa.
Los campos, al final, no son tan verdes para los que son amados
Como para los que no lo son.
Sentir es estar distraído.

Alberto Caeiro
Poemas Inconjuntos
traducción de Mario Bojórquez